viernes, 24 de octubre de 2014

Woman, open your eyes.

¿En serio? No me jodas.
Te empeñas en verlo todo negro y oscuro. Que la única luz que ilumina tu propia vida eres Tú. Mejor dicho, Tú y tu egocentrismo, que brilla por sí solo.
Que cuidado, podría ser. Podría ser que estuvieras en un barco de nubes metafóricas blancas como la leche que le echas al té todas las mañanas, en medio de un mar de petróleo y de llantos negros.
Pero como no es así, todas tus excusas me resultan inválidas. A mí y a todos.
Poca gente te apoya. Aún así, quieres exponer tu punto de vista, inculcar tu opinión y excluír a todo el que la ignore.
Mi confianza en ti ha pasado a ser plena, a ser nula.
Intento comprenderte, intento atravesar la tupida niebla que nos separa, pero una tormenta se forma en el cielo que me impide avanzar.
Y esa tormenta la creas Tú.
La vida es bonita, y tú misma estropeas la tuya, afectando en gran medida a los demás. ¿Pero por qué lo haces? ¿Esa es tu meta en la vida?
He intentado dejar de quererte. He intentado odiarte. Pero no puedo. Por que un lazo nos une, queramos o no. Y muchas veces digo que no, que te odio, que no hay peor persona en el mundo, pero...Querida, te quiero, y lo sabes, y no te lo oculto.
Aunque yo desaparezca, ese lazo seguirá estando ahí. Incluso más fuerte. Aunque Tú desaparezcas, ese lazo también seguirá estando ahí.
Muchas veces he deseado cambiarte por otra.
Al final espero arrepentirme de desearlo.
Por que como tú no hay más que una. Y es verdad que te encierras cada vez más, te envuelves en una cortina negra...Y también me colocas una cortina negra a mí. Para que no sobresalga. Para que nadie me vea, ni sienta que estoy allí.
Lo siento. Lo siento.
Siento pensar todas estas cosas malas de ti.
Pero aprende a abrir la mente, a abrir los ojos, a ponerte unas buenas gafas, y a no juzgar todo lo que se presenta frente a ti, sea libro, persona u oportunidad.
Eso es todo lo que tenía que decirte, mamá.

-Redshell.


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